Las cuatro playas nudistas preferidas en Latinoamérica

Al contrario que en Europa, la práctica del nudismo no es una costumbre tan difundida y arraigada en las playas de Latinoamérica. Durante las últimas décadas, la práctica del nudismo en la playa ha sumado cada año más adeptos latinoamericanos que buscan disfrutar de la naturaleza a pleno y sin ningun tipo de inhibiciones.

A lo largo de los últimos años, los adeptos al naturismo a través el nudismo están creando circuitos sociales para promover y organizar esta práctica. En Brasil, por ejemplo, se ha creado hace ya algunos años la Federación Brasilera de Naturismo, en Argentina se encuentra organizada por la Asociación para el Nudismo Naturista Argentino y en Chile se promueve esta práctica a través de la asociación llamada Nudismo Chile. Dichas asociaciones ya han organizado diferentes seminarios y encuentros a nivel regional en diferentes ocasiones a lo largo de los últimos años.

Estas asociaciones fueron consultadas sobre las playas más recomendadas de esta región, y son cuatro los puntos que atraen la preferencia de los nudistas latinoamericanos. Playa Escondida, en la ciudad de Mar del Plata, presume de ser la primera playa nudista de la Argentina.

Tal como su nombre lo indica, es un sitio apartado y que se oculta entre acantilados y un entorno muy agreste que no facilitan su acceso. Playa Chihuahua se sitúa en la costa uruguaya, próxima al centro turístico de Punta del Este. Fue oficial inaugurada por el municipio de Maldonado en el año 2000, aunque el nudismo ya se practicaba allí de manera clandestina desde la década de 1960.

Praia do Pinho, sobre la costa sur de Brasil, está considerada como la primera playa brasileña donde se pudo practicar nudismo. Se sitúa en la ciudad balnearia de Camboriu, a sólo 80 kilómetros del popular destino turístico de Florianopolis.

Playa Luna, en el litoral chileno, se presenta como la única playa autorizada para practicar el nudismo en el país andino. Próxima a las ciudades de Valparaíso y Viña del Mar, Playa Luna destaca por su magnífico paisaje y la gran cantidad de aves que se congregan junto a sus farellones.